jueves, 1 de noviembre de 2007

A TI: COINCIDENCIA CITADINA BAÑADA DE RECONOCIMIENTO AÑEJO

A veces no puedo entender
cómo no te das cuenta de lo que pasa
cuando te reflejas en mis ojos.

Las cosas no pueden ser tan disímiles,
no creo que unos cuantos otoños
modifiquen la esencia
de los actos que me delatan contigo.

No puedo evitar sentirme impasciente
cada vez que estás lejos y no puedo verte
¿qué es lo que pasa por tu cabeza?
¿por qué haces parecer las cosas como un imposible?

No hay nada que desee más hoy
que saber en donde estás:
llegarte por la espalda y cubrir tus ojos
para que al voltear no haya marcha atrás.

Sin embargo me empeño en ser necia,
en ignorar tus señales de absoluta indiferencia
abanderada de la fe, esas ganas ciegas de creer
que las cosas son como yo creo.

Habla ahora o calla para siempre,
porque nadie merece ser esperado eternamente
necesito escuchar si es un nunca o siempre;
la gente como yo no sabe qué hacer con la incertidumbre.

Si te abrí un poco de mi alma
y eso te dibujo algunas sonrisas
¿qué pasa entonces?
quiero saber si es una cuestión de libertad, de moral o de fe.

1 comentario:

Joel Zapata dijo...

Orale!!!!! me recordo a una platica ke tuve por ahi el dia miercoles, "Las cosas no pueden ser tan disímiles,
no creo que unos cuantos otoños
modifiquen la esencia
de los actos que me delatan contigo." ke fuerte amiga!!!!! cada vez te rifas mas sigue asi!